La Unión Europea se ha comprometido a alcanzar la neutralidad climática para el año 2050 y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero al 55% de los niveles de 1990 para el año 2030. Este objetivo denominado Net Zero 2050 obligará a transformar profundamente los procesos industriales sustituyendo las fuente de energía fósiles y avanzando en el uso del CO2 como fuente de carbono.

El objetivo del proyecto está enfocado al diseño de nuevos materiales, para su uso como catalizadores, para afrontar los retos de la transición energética, basado en un conocimiento fundamental de la naturaleza de los centros activos, obtenido mediante estudios espectroscópicos in situ y de DFT.
Se abordarán 4 ejes de acción:
1) Procesos electroquímicos para la generación de H2 y reducción de CO2 desde una perspectiva mecanística.
2) Valorización de CO2 para la obtención de productos de mayor valor añadido mediante la reducción térmica del CO2.
3) Captura y reducción in situ de CO2 a metano mediante procesos de “chemical looping”.
4) Materiales para el medio ambiente y procesos sostenibles.
La principal limitación que impide el despliegue de estas tecnologías es la baja eficiencia de los procesos y la baja estabilidad de los catalizadores actuales.